«El aire hace el águila» Goethe
AIRE: Libertad, ideas, cambio, desapego, perspectiva, curiosidad y necesidad de socializar.
Es el elemento que simboliza la curiosidad, la lógica y la comunicación. En los seres humanos el aire representa la mente consciente, cuya función es estimular el razonamiento lógico y el intercambio de información. Esta es la razón por la que este elemento favorece la razón y la lógica sobre la sensibilidad o las emociones.
Al ser el elemento clave de la comunicación y la creatividad, quien se rige por este signo tiende a ser bastante “aéreo” y cultivar la mente y la imaginación.
También puede hacer la presencia del aire que la personalidad sea volátil, cambiemos rápido de opinión y fácilmente y esto favorece el cambio y la libertad en las vidas.
El aire hace que queramos preservar nuestro espacio, sin ataduras ni restricciones. No es fácil predecir las acciones debido a la tendencia a la inestabilidad e imprevisibilidad.
El aire hace que necesitemos comprender todo lo que experimentamos y que prefiramos pensar más lógicamente que emocionalmente, se tiende a ser muy activo y sociable, y vivir separados del mundo material.
Hace de nosotros personas sensibles y seductoras, aunque no deja expresar fácilmente os sentimientos y emociones y no siempre hace que actuemos como pensamos y que seamos los primeros en cuestionarnos todo.
El Aire equilibrado es sueve, objetivo, sociable y correcto. Sin este elemento la personalidad estaría estancada y seria introvertida e irracional.
Es un elemento importante para comprender los hechos a nivel racional y para no quedar atrapados en los detalles y no perder la capacidad de ver el panorama general, percibir e interconectar los diversos aspectos del mismo problema. La mente sin aire tiene dificultades para tratar información diversa al mismo tiempo.